DICIEMBRE 2018

Una Breve reflexión.

 

En estas fechas, regularmente decimos en son de broma “Nos vemos el próximo año”, y mentalmente pensamos que debería de pasar mucho tiempo antes de volvernos a ver, sin embargo, sabemos que estamos a unos días de ese “próximo año”.

 

La pregunta obligada es: ¿Cómo sabes si nos veremos el siguiente año? La muerte es impredecible, no se puede controlar y mucho menos programar para cuando quisiéramos que nos visitara.

 

Te propongo algo, que la próxima vez que te despidas de alguien, la veas a los ojos y te despidas con un “hasta pronto” pero con la idea de que no la volverás a ver un mucho tiempo. Si así fuesen las cosas, ¿cómo te despedirías de esa persona?

 

Puede ser un ejercicio para el 31 de diciembre: toma las manos de la persona que tengas a tu lado derecho y dile todo lo que quisieras decirle como si no la volvieras a ver. Inténtalo, te sorprenderá el resultado.

 

Por otra parte, y pensando en las fechas decembrinas. En estas fechas hemos oído muchos deseos de bien y prosperidad, por poner algún ejemplo, ¿has escuchado lo siguiente?:

 

“espero que la pases extraordinario y que todos tus deseos se cumplan”

 

“mil felicidades y espero que el próximo año venga cargado de éxitos” (esta yo la aplico)

 

“que el próximo año nos vaya mejor que este”

 

“que el próximo año tengas mucha salud, que tengas muchos logros, que no te falte el dinero y el amor, pero, sobre todo, mucha salud que con eso ya vamos de gane”

 

Si lo pensamos fríamente y nos respondemos a nosotros mismos con honestidad (no nos podemos engañar a nosotros mismo, ¿estás de acuerdo?)

Con la salud que tuviste este año, ¿ya la tuviste de gane? Es el momento ideal para responderte porque estamos a nada de que se termine el año.

 

Esos deseos de que tengas muchos logros, ¿los logros se dieron sólo porque los deseaste o porque te los desearon? Algo tuviste que hacer para que los logros se dieran, ¿cierto? Y si no se dieron esos logros, entonces, algo dejaste de hacer.

 

“Que el próximo año venga cargado de éxitos” esos “éxitos”, ¿sólo están esperando que inicie el próximo año para caer en cascada sobre ti? ¿caerán como lluvia de invierno? Tal vez si porque si no estas preparado para recibir esos “éxitos” te caerán como agua helada que te paralizara y consecuentemente ni los podrás manejar, ni los aprovecharas y los dejaras pasar de largo.

 

Para que los éxitos y los parabienes deseados en esta temporada se den, es imprescindible Hacer que sucedan, Provocar que sucedan, lo maravilloso de esto es que: DEPENDE DE TI QUE LAS COSAS SUCEDAN. 

 

Hablando del amor, ¿viviste el amor este año que termina? Y hablo del amor, de ese amor del bueno, no solo del enamoramiento, del amor amor, de ese que debes cultivar, de ese que debes de cuidar y que sobretodo, le debes de dar mantenimiento porque de lo contrario lo puedes perder. Ese amor al que llevaste a comer, a cenar, a tomar una copa, al cine, a bailar, al parque, a donde sea, ese amor al que le invertiste dinero porque ni el cine ni el parque ni nada es gratis. Ese amor, se dio y cultivó ¿sólo porque te lo desearon? ¿Por qué lo deseaste? O ¿porque trabajaste para invertirle? Tuviste que hacer algo, tuviste que trabajar, tuviste que moverte y provocar que las cosas se dieran ¿cierto o no es cierto?

 

“Feliz año…. Que todos tus deseos se hagan realidad”

 

1.- Ten cuidado, mucho cuidado porque si todo lo que deseas se hace realidad ¿estás preparado para manejarlo? Un refrán chino o no sé cómo se llame dice “ten cuidado con lo que deseas porque se puede hacer realidad” ¿lo has escuchado?

 

2.- ¿Alguno de tus deseos del año 2017 se hizo realidad en el 2018 sólo porque alguien te lo deseo? Y la pregunta que te llevará al límite ¿tuviste deseos nuevos que en años anteriores no tuviste? Porque si son los mismos, quiere decir que tal vez no se cumplieron y eso fue porque seguramente no te enfocaste a que se dieran los resultados esperados. ¿Me sigues?

 

3.- APUNTALO: No se trata de hacer un balance de lo que fue el año, en donde digas que “bueno, como todo, hubo buenos y malos momentos pero sólo recuerdo los bellos y los malos los deshecho” porque entonces echarías por la borda o a la basura la experiencia vivida.

 

Sencillamente, y para terminar. ¿Cómo te sientes con este año que termina? ¿Satisfecho? ¿Pudiste haberlo hecho mejor? (ahí está la respuesta) Y también hazte preguntas por “concepto”, responde honestamente a las siguientes preguntas: 

- ¿Cómo me siento económicamente?

 

- ¿Cómo me siento con respecto a mi salud?

 

- ¿Me siento feliz? No por un evento, en términos generales.

 

- ¿Me siento enamorado y siento que me corresponden?

 

- ¿Qué deseos y aspiraciones tengo para el 2019?

 

- ¿Preparé camino para hacerlo?

 

- ¿Cómo me siento en relación con mi familia?

 

El desafío es, que te hagas tus propias preguntas, que te pongas metas y objetivos a corto plazo, que des los pasos necesarios para provocar que las cosas se den a tu favor, que sigas adelante sin detenerte y, si te vas a detener que sea sólo para tomar aire y seguir adelante.

 

¿Te esforzaste y no funciono? Cambia la técnica, ¡pero cámbiala!

 

De unos años a la fecha, se escucha hablar de “las cadenas productivas” pues bien, te reto, te… ¿Cómo se dice?....(no encontré la palabra) te invito a que “el puerto” a dónde quieres llegar, lo hiles y vayas construyendo un futuro solido mientras nos quede vida en este plano existencial.

 

Dios te Bendice.

 

PD: Cuando te escribo o te digo “Dios te Bendice, OJO, permite que Dios te bendiga peeeeero, has lo necesario para que así sea.

Ricardo Hernández.Una Breve reflexión.

En estas fechas, regularmente decimos en son de broma “Nos vemos el próximo año”, y mentalmente pensamos que debería de pasar mucho tiempo antes de volvernos a ver, sin embargo, sabemos que estamos a unos días de ese “próximo año”.

La pregunta obligada es: ¿Cómo sabes si nos veremos el siguiente año? La muerte es impredecible, no se puede controlar y mucho menos programar para cuando quisiéramos que nos visitara.

Te propongo algo, que la próxima vez que te despidas de alguien, la veas a los ojos y te despidas con un “hasta pronto” pero con la idea de que no la volverás a ver un mucho tiempo. Si así fuesen las cosas, ¿cómo te despedirías de esa persona?

Puede ser un ejercicio para el 31 de diciembre: toma las manos de la persona que tengas a tu lado derecho y dile todo lo que quisieras decirle como si no la volvieras a ver. Inténtalo, te sorprenderá el resultado.

Por otra parte, y pensando en las fechas decembrinas. En estas fechas hemos oído muchos deseos de bien y prosperidad, por poner algún ejemplo, ¿has escuchado lo siguiente?:

“espero que la pases extraordinario y que todos tus deseos se cumplan”

“mil felicidades y espero que el próximo año venga cargado de éxitos” (esta yo la aplico)

“que el próximo año nos vaya mejor que este”

“que el próximo año tengas mucha salud, que tengas muchos logros, que no te falte el dinero y el amor, pero, sobre todo, mucha salud que con eso ya vamos de gane”

Si lo pensamos fríamente y nos respondemos a nosotros mismos con honestidad (no nos podemos engañar a nosotros mismo, ¿estás de acuerdo?)

Con la salud que tuviste este año, ¿ya la tuviste de gane? Es el momento ideal para responderte porque estamos a nada de que se termine el año.

Esos deseos de que tengas muchos logros, ¿los logros se dieron sólo porque los deseaste o porque te los desearon? Algo tuviste que hacer para que los logros se dieran, ¿cierto? Y si no se dieron esos logros, entonces, algo dejaste de hacer.

“Que el próximo año venga cargado de éxitos” esos “éxitos”, ¿sólo están esperando que inicie el próximo año para caer en cascada sobre ti? ¿caerán como lluvia de invierno? Tal vez si porque si no estas preparado para recibir esos “éxitos” te caerán como agua helada que te paralizara y consecuentemente ni los podrás manejar, ni los aprovecharas y los dejaras pasar de largo.

Para que los éxitos y los parabienes deseados en esta temporada se den, es imprescindible Hacer que sucedan, Provocar que sucedan, lo maravilloso de esto es que: DEPENDE DE TI QUE LAS COSAS SUCEDAN. 

Hablando del amor, ¿viviste el amor este año que termina? Y hablo del amor, de ese amor del bueno, no solo del enamoramiento, del amor amor, de ese que debes cultivar, de ese que debes de cuidar y que sobretodo, le debes de dar mantenimiento porque de lo contrario lo puedes perder. Ese amor al que llevaste a comer, a cenar, a tomar una copa, al cine, a bailar, al parque, a donde sea, ese amor al que le invertiste dinero porque ni el cine ni el parque ni nada es gratis. Ese amor, se dio y cultivó ¿sólo porque te lo desearon? ¿Por qué lo deseaste? O ¿porque trabajaste para invertirle? Tuviste que hacer algo, tuviste que trabajar, tuviste que moverte y provocar que las cosas se dieran ¿cierto o no es cierto?

“Feliz año…. Que todos tus deseos se hagan realidad”

1.- Ten cuidado, mucho cuidado porque si todo lo que deseas se hace realidad ¿estás preparado para manejarlo? Un refrán chino o no sé cómo se llame dice “ten cuidado con lo que deseas porque se puede hacer realidad” ¿lo has escuchado?

2.- ¿Alguno de tus deseos del año 2017 se hizo realidad en el 2018 sólo porque alguien te lo deseo? Y la pregunta que te llevará al límite ¿tuviste deseos nuevos que en años anteriores no tuviste? Porque si son los mismos, quiere decir que tal vez no se cumplieron y eso fue porque seguramente no te enfocaste a que se dieran los resultados esperados. ¿Me sigues?

3.- APUNTALO: No se trata de hacer un balance de lo que fue el año, en donde digas que “bueno, como todo, hubo buenos y malos momentos pero sólo recuerdo los bellos y los malos los deshecho” porque entonces echarías por la borda o a la basura la experiencia vivida.

Sencillamente, y para terminar. ¿Cómo te sientes con este año que termina? ¿Satisfecho? ¿Pudiste haberlo hecho mejor? (ahí está la respuesta) Y también hazte preguntas por “concepto”, responde honestamente a las siguientes preguntas:

- ¿Cómo me siento económicamente?

- ¿Cómo me siento con respecto a mi salud?

- ¿Me siento feliz? No por un evento, en términos generales.

- ¿Me siento enamorado y siento que me corresponden?

- ¿Qué deseos y aspiraciones tengo para el 2019?

- ¿Preparé camino para hacerlo?

- ¿Cómo me siento en relación con mi familia?

El desafío es, que te hagas tus propias preguntas, que te pongas metas y objetivos a corto plazo, que des los pasos necesarios para provocar que las cosas se den a tu favor, que sigas adelante sin detenerte y, si te vas a detener que sea sólo para tomar aire y seguir adelante.

¿Te esforzaste y no funciono? Cambia la técnica, ¡pero cámbiala!

De unos años a la fecha, se escucha hablar de “las cadenas productivas” pues bien, te reto, te… ¿Cómo se dice?....(no encontré la palabra) te invito a que “el puerto” a dónde quieres llegar, lo hiles y vayas construyendo un futuro solido mientras nos quede vida en este plano existencial.

Dios te Bendice.

PD: Cuando te escribo o te digo “Dios te Bendice, OJO, permite que Dios te bendiga peeeeero, has lo necesario para que así sea.

Ricardo Hernández.